Más allá de la histeria y el show montado en el día de ayer por Alfredo Coto de cuestionar al intendente Fernando Espinoza por la clausura del supermercado en Ramos Mejía, la razón fue simple: gusanos, heladeras contaminadas y sin recaudos de higiene en la quesería. El empresario afirmó que el intendente “esta fuera de sus cabales” y consideró que “no debe gobernar La Matanza”, como si él decidiera el voto de los matanceros.
El Municipio de La Matanza informó que la clausura de la sucursal de la avenida Rivadavia en la localidad de Ramos Mejía del Supermercado Coto se realizó por cuestiones de higiene y bromatológicas. En la inspección de rutina desarrollada por personal del Municipio se constató la presencia de productos que no cumplían con las normas y la reglamentación de sanidad.
Entre otras irregularidades, se detectaron productos con fecha de vencimiento manipulada, productos sin la pertinente refrigeración, mal manejo de residuos, falta de limpieza en espacio donde se manipulan fiambres, quesos y carne, sangre de carne picada cayendo sobre tortas y productos de repostería, lo que lleva a un potencial riesgo de contaminación cruzada de alimentos.
Además, se constató que varios productos excedían los topes máximos de precios exigidos por el Estado nacional. Por este motivo, el personal a cargo de la inspección dio aviso inmediato a la Secretaria de Comercio de la Nación.
Desde el Municipio de La Matanza se espera que se realice la desinfección pertinente y que se cumpla con las reglamentaciones bromatológicas, especialmente en momentos en los que la pandemia exige que las condiciones de limpieza y desinfección sean ejemplares.
En estos momentos de emergencia sanitaria nacional producto de la pandemia del Coronavirus el Municipio no tiene intereses específicos en cerrar un supermercado. Pero tiene que velar por los intereses, el beneficio y la salud de todos los matanceros.
Fuente: info135